Daguerrotipos.

NOTA XII. Fragmentos del libro homónimo, editado en septiembre de 2005 por la Municipalidad de Jesús María y el Ministerio de Gobierno, Coordinación y Políticas Regionales, incluido en el programa "Edición de Historias Populares Cordobesas". Un aporte para conocer más de nuestro pasado y entender el presente.

Historias 18 de mayo de 2020
Puente sobre el río Jesús María

“El daguerrotipo fue el primer proceso de fotografía práctica, inventado por el francés Louis Daguerre en 1839. Se trataba de una imagen positiva única (sin negativo), registrada sobre una placa de cobre pulida y plateada, que se emulsionaba con vapores de iodo y se revelaba con mercurio. El daguerrotipo tenía los laterales invertidos, como si nos miráramos en un espejo”.

Al centro, de compras (II).

Si se habla de tienda, no se puede ignorar a las colectividades árabe y libanesa, especialmente.

Entre los llegados a Argentina estaba Don Seba Naum, el padre de Alfredo. "Mis padres acá empezaron rápidamente con el comercio, se dedicaron al negocio de tienda, pero en la venta más bien callejera en sus comienzos. Salían con su valijita, golpeaban casa por casa. Bueno. Y así empezaron. Porque llegaron en una posición económica realmente baja, recién llegados, con ganas de trabajar. Allá, cuando recién llegaron, los primeros años, en Buenos Aires mi padre trabajaba de Guarda de tranvía. Y Don Parodi  que fue quien lo invitó a venir a Jesús María, lo mismo. Y mi tío Juan también. Estaban en esas cosas, ¿no? Pero, más o menos, les iba bien. Tan es así que mi padre logró comprarse una casa en Buenos Aires, en Villa Devoto. Una casita chica que, después que resuelve venirse a Jesús María, después de muchos años, decide venderla. Ahí se habían quedado viviendo unos parientes de él".

En Jesús María, su primer negocio fue una tiendita en la actual John Kennedy, a unos 30 metros de la esquina con Tucumán.

Después, Don Seba Naum vendió la propiedad que tenía en Buenos Aires y compraron una casa en la calle Córdoba, cerca del paso a nivel de la calle 9 de julio, que por entonces no existía. Ahí trasladaron la tienda.

Su historia familiar es muy interesante. Alfredo cuenta: "Con mi hermano Emilio nos dedicábamos a hacer corretaje. (...) Nos íbamos para Ascochinga, La Granja, Santa Catalina, Agua de las Piedras. Toda esa zona recorríamos".

En ese entonces se empezó a construir la Colonia Hogar, cerca de Santa Catalina, y los hermanos Naum le vendían a la gente que trabajaba en la obra. "Aprovechábamos las quincenas, las pagas, para ir a vender. Y se llenaba de gente en torno al auto. (...) Se les fiaba a la gente. Cuando íbamos, en la próxima quincena, te pagaban. Nuestras primeras armas fueron esas, salir a vender afuera. ¡Y mi hermano Emilio era muy buen vendedor ambulante! Salía con la valijita a vender por el pueblo. Te hablo de cuando él tenía 14 o 15 años".

De la calle Córdoba, trasladaron su actividad a la calle Tucumán. Allí había sido instalada una tienda por unos "paisanos" suyos de la ciudad de Córdoba, y era hermosa para la época Como no se querían quedar en Jesús María y habían hecho amistad con Emilio, le ofrecieron el negocio en condiciones muy ventajosas y sin entregar un peso. El padre de Emilio no estaba de acuerdo con la compra porque no le gustaba tener deudas con nadie. Pese a su resistencia, Emilio - ya tenía unos 20 años - la compró. "Había que pagarla, me acuerdo, a razón de unos 700 pesos de la época; nos dieron un año y medio de plazo para pagarla, ¡y tenía un surtido!... Fue así, sin hacer balance, sin nada, con todos los muebles y útiles. Una hermosa tienda, con un stock de mercadería extraordinario. Y así empezamos nosotros. El dueño era mi padre, Don Seba Naum", amplía Alfredo.

Pero la "empresa" de los Naum tenía otro valor agregado. "Mi mamá, en aquel entonces, era una gran corsetera. Aprendió el oficio de la mamá de la escribana Bizzochi de Marino. (...) Después, mi madre logró ser una de las principales corseteras que le hacía a toda esa gente que venía - muy adinerada - a La Pampa, Ascochinga."

" La Sra. de Don Vicente Agüero iba para que le hiciera la faja y los corsetes, los sombreros de luto con cola que llegaba hasta el suelo. A todo eso lo hacía mi madre. En una palabra, te diría que mi madre, en nuestros comienzos, te diría que ha sido el sostén nuestro", agrega Alfredo. "Porque mi padre no tenía muchas iniciativa, era muy miedoso, no quería contraer compromisos", reprocha a la distancia.

Pero, ¿cómo fue que esta familia decidió radicarse en Jesús María?

"El primero que llegó fue Don Abraham Parodi, el padre del Dr. Jorge Parodi. (....) Fue entusiasmándolo a un hermano de mi padre que se llamaba Juan Naum, menor que mi padre, para que se viniera acá, que Jesús María era muy lindo, que era un pueblito chico, que se vivía bien. Y Don Juan Naum también vino para acá con su maletita desde Buenos Aires", cuenta Alfredo.

Don Parodi eligió esta Villa por un motivo bien específico: "Jesús María, Ascochinga, estaban muy reconocidas por el buen clima para los en-fermos de pulmón". Y le habían recetado que viniera acá. Esto fue, aproximadamente, en 1919.

Don Seba Naum tenía varios hijos. Jorge nació en 1914. El segundo era Esteban Juan, popularmente conocido como Emilio aunque no es su verdadero nombre. Era Clase 1918. Le seguía Guillermo Esteban, "un célebre personaje de esta ciudad" - al decir de su hermano - "Era muy querido y gozaba de mucha simpatía en la comunidad".

En 1921 nació Alejandro. Le siguieron Alfredo (1924) y Héctor (1931), quien murió muy joven, cuando tenía 37 años de edad. La última de los hermanos fue Elena.

Volviendo a las tiendas, otra muy conocida era Don Fortunato, en la esquina de Comercio (actual Ing. Olmos) y Tucumán. "Tenía un surtido tan grande, trabajaba tanto, que su principal competidor era Tienda La Nueva", comenta Alfredo Naum.

"¡La cantidad de sulkis, de caballos que paraban! Había palenques que ocupaban, fácilmente, toda la cuadra sobre Ing. Olmos (Desde Tucumán hacia Cástulo Peña), para que ataran sus caballos, las jardineras - que era en lo que se andaba en esa época - gente que venía de las colonias, de los alrededores. ¡Trabajaba!... era un hormiguero de gente".

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