Asamblea permanente y violenta protesta de los Municipales de Jesús María

Jesús María. El Sindicato de Trabajadores Municipales (SITRAM) se movilizó por las calles de la ciudad en la mañana del miércoles, en reclamo por el incumplimiento del pago de los aumentos acordados a fines de 2023 con el Ejecutivo.

La recomposición pactada debía ser pagada a partir de enero y no se hizo efectiva.

El martes convocaron a una asamblea y como el intendente Federico Zárate estaba en Buenos Aires no fueron atendidos por ninguna otra autoridad municipal. Luego de un cuarto intermedio, el miércoles marcha- ron hasta la sede de la Municipalidad.

Además, ingresaron al CAM (ex IMEI) y a las oficinas de Obras Públicas, en el Obrador Municipal, donde vandalizaron las instalaciones: papeles en el suelo, muebles dañados, agresiones verbales y hasta físicas al resto de los empleados que trabajaban en esos lugares fueron parte del repertorio de excesos de un grupo de exaltados.

El reclamo.
El gremio decidió permanecer en asamblea permanente, una forma elegante de decir que están de paro, lo que afecta a los servicios.

A fines de 2023, el Sitram acordó cláusula gatillo, bono y un aumento real de salario en un 8 por ciento por encima de la inflación, dividido en dos cuotas: 4 por ciento con los salarios de enero y sobre ese último haber otra cuota igual en febrero.

Ahora, el intendente Federico Zarate les propone la misma política salarial que el gobernador Martín Llaryora acordó con el SEP a nivel provincial: una recomposición salarial del 50 por ciento de la inflación mensual, lo que fue rechazado de plano por los municipales porque licúa mes a mes el poder adquisitivo.

En enero, los trabajadores acordaron un aumento del 15 por ciento y sumas no remunerativas que compensaban todos los otros aumentos no pagados.

Su cumplimiento es la base del reclamo: que les reconozcan toda la inflación de enero y febrero y el aumento del salario real en todos los ítems.

21-02-2024