Caso Cadamuro: La confesión de Nicolás Rizzi quebró el pacto de silencio

Después de más de dos años de silencio, Nicolás Rizzi, declaró ante la Justicia y confesó que ayudó a Jeremías Sanz a enterrar el cuerpo de María Eugenia Cadamuro, la noche del 15 de marzo de 2017.

El joven, imputado por encubrimiento agravado, contó ante la Fiscalía de Instrucción de Jesús María cómo y dónde se dieron los hechos posteriores al homicidio, que le atribuyó a su amigo Sanz.

Esa declaración fue leída en la Cámara 8ª del Crimen de la ciudad de Córdoba, donde es juzgado el hijo de “Maru” por la autoría material del asesinato.

A partir del relato de Rizzi, se conoció información que hasta entonces no estaba incorporada al expediente. Su aporte fue clave en la última instancia del juicio que la próxima semana llegaría a su fin.

Según confirmó a El Despertador Diario, el abogado de la querella, Luis Juez, el joven admitió que todas las veces que fue interrogado en la fiscalía había mentido.

Además, contó que esa noche cuando él estaba regresando del campo en su  vehículo junto a dos empleados, mantuvo una comunicación con Jeremías en la que le dio a entender que algo había hecho y le pidió que lo fuera a buscar a Jesús María.

Siempre de acuerdo al relato del joven, se encontró con él en la calle Bv. Agüero y de ahí se dirigieron hacia la Ruta 9, cada uno en su camioneta. Luego tomaron la ruta 60, hasta llegar al campo donde Sanz le mostró el cadáver de María Eugenia.

Finalmente, cargaron el cuerpo, lo envolvieron entre mantas y bolsas, y lo arrojaron en una fosa en el lugar donde fue hallado tres meses después del crimen. 

“El testimonio de Rizzi echa por tierra toda la mentira de Jeremías”, manifestó Juez. 

Por otro lado, confirmó que el juicio está en su instancia final y el próximo miércoles serán los alegatos.