Piden que los testigos del crimen de Agustín Avila aporten lo que vieron

Jesús María. En los días posteriores al crimen de Agustín Ávila, los familiares hicieron marchas y convocatorias para visibilizar su pedido de justicia.

En Guiñazú, lugar donde residía la víctima, la madre y el padrastro organizaron una manifestación.

En Jesús María, en las puertas del anfiteatro José Hernández que fue escenario de la muerte, el papá, Gustavo Ávila, convocó a sus conocidos y unas 50 personas con carteles que pedían, públicamente, más imputaciones por el crimen, mientras el público ingresaba a la quinta jornada del Festival. El espectáculo debe continuar. Ni siquiera tuvieron la deferencia de bajar la música los 15 minutos en que la familia expresó públicamente su dolor.

Vanesa, la mamá, fue víctima y testigo de lo que ocurrido: vio morir a su hijo mientras se recuperaba de los golpes que recibió de otros integrantes de la patota. “No llegué a defenderlo, no me pude levantar”, dijo.

Gustavo, de profesión peluquero y vecino de Colonia Caroya, tomó el micrófono frente a los periodistas –como de costumbre, ninguna autoridad está cuando parte de la comunidad exige respuestas- y se quebró al contar que con su hijo empezaba a tener una relación más fluida y que pronto querían ir juntos a ver los partidos de Talleres.

Mientras una mujer gritaba “¡Basta de boliches atrás de la Doma!”, Gustavo se preguntó por qué el día posterior todos abrieron como si nada hubiese pasado.

“Estoy de pie por la gente, por los mensajes, por mis otros hijos; si vos no pedís justicia, esto queda en la nada; que paguen todos los que participaron y si no, que paguen los padres”, dijo.

También mencionó con ironía lo que pasó en la Comisaría durante el domingo: “Iban los padres como si fuese un Jardín de Infantes y retiraban a sus hijos, que habían participado de un asesinato. ¿Y sabes que hacían? Cuando los largaban, aplaudían. Ahora están libres y el fin de semana van a venir a patotear a cualquiera”. 

Aunque hay varios videos de los momentos previos y del crimen, los familiares de Guiñazú, Jesús María y Colonia Caroya piden que los testigos se presenten a declarar y cuenten lo que vieron.

“Fueron 20 contra uno; no voy a parar hasta que haya justicia contra todos”, anticipó Gustavo.

13-01-2023